Páginas

jueves, octubre 14, 2010

Cartas (I): V.

Fue curiosa la primera impresión -equivocadísima- que tuve de ti. Tan serio me pareciste, con tu mirada aguda y tus apenas tres palabras saliendo de tu boca... ya te he dicho alguna vez que ese primer día que nos conocimos, en una posición tan desigual además, me diste casi miedo (y sin el casi también).

Pero eso, ¿cuándo fue? Hará ocho anyos. Y en ese tiempo nos hemos ido conociendo y cogiendo carinyo. No sólo yo a ti, que eso es fácil, tú bien te lo ganas, sino que sé que tú también me aprecias y a tu manera me cuidas. Sí, tú que eres tan reacio a las demostraciones de afecto... pero yo sé bien que conmigo las tienes, sutiles pero ahí están.

En estos ocho anyos he aprendido de ti, me has ayudado, me has apoyado, me has comprendido... hemos estado cerca, muchas veces, ya digo, aun sin palabras, pero un poco bajo tu ala. Y hoy que nuestros caminos, esos que llevábamos en paralelo desde hace ocho anyos, se separan, tiemblo un poco y qué quieres, ya sabes que soy de lágrima fácil, se me empanya la vista.

Quisiste que me enterara por ti y no en la reunión con todo el mundo. Me dijiste que sería también lo mejor para todos en la situación en la que estamos, yo no dudé en decirte que perderte no podía sino minarnos un poco más. Me tranquilizaste diciendo que seguiríamos en contacto, que no desaparecías ni te volvías ilocalizable, que estabas allí. Pero yo sé que muchas veces eso son palabras, no huecas, pero que se quedan en intenciones que no se cumplen. Aún así quiero creerte, pensar que estás a tiro de piedra, que cualquier día podemos comer y contarnos.

Y te deseo lo mejor en tu nueva andadura, esperando volver a verte pronto y no perder el contacto. Y me río de aquella primera impresión que tuve de ti, me río de quien dice que eres un hombre frío y gris (quien no se ha acercado, claro, y habla desde el desconocimiento).

Ya mismo empiezo a echarte de menos y a notar tu ausencia. Ya noto el frío en mi cuello, buscando el ala que ya no está.

Que tengamos suerte...

4 comentarios:

  1. distancia nos ha declarado la guerra
    pero nosotros siempre ganamos (si luchamos)



    ánimo señorita

    ResponderEliminar
  2. os comprendo,mi primer, gran y único amor hasta ahora, se casa, y manejar esta situación se esta volviendo dolorosa y complicada... no se como podré seguir viviendo sin la protección de su ala, pero algo me dice que será lo mejor
    gracias por esta hermosa entrada

    ResponderEliminar
  3. "... seguiríamos en contacto."

    Y a lo mejor esta vez es de verdad, de la buena.

    ñ_ñ

    ResponderEliminar